Durante la semana de Reyes las cantidades vendidas por los comercios minoristas pymes cayeron 11,5% frente a la misma fecha de 2018, según los datos relevados por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Además, en el estudio se destaca el declive del consumo general y que este festejo va perdiendo atractivo entre las familias año tras año.
En la modalidad online, las ventas subieron 0,9% (siempre medidas en unidades), mientras que en los locales tradicionales declinaron 13,3%.
Así surge del relevamiento realizado por CAME entre el 4 y 5 de enero en 1560 comercios de las ciudades capitales del país, incluyendo CABA y Gran Buenos Aires, por un equipo de 35 encuestadores y 5 supervisores.
El ticket promedio este año rondó los $600, un 39,5% por encima del 2018 ($430). Las familias se orientaron a productos económicos, en general uno por niño o niña.
Una encuesta realizada por la consultora Focus Market (FMK) para CAME entre 4.200 casos: el 50% de las ventas de la fecha se realizó en comercios de calles y avenidas, 27% en supermercados y shopping y 13% por internet.
Este año, no se realizaron grandes promociones, más que algunos descuentos con tarjetas y ofertas con rebajas de 30% o 40%, pero que no fueron suficientes para generar grandes ventas.
El 80,4% de los comercios físicos medidos finalizaron con descensos anuales en sus ventas. Sólo el 13,5% creció.
