El último informe del INDEC, publicado el martes 23 de abril, informó que la inflación mayorista se aceleró en marzo al alcanzar un 4,1% frente al 3,4% de febrero, con lo que la suma de los últimos 12 meses es del 68% acumulado e implica que los precios mayoristas subieron un 13,3% más que los minoristas y que la crisis inflacionaria está lejos de haber terminado.
El aumento de los precios mayoristas se explicó por la suba de 4,1% en los «Productos nacionales» y de 4,4% en los «Productos importados», en un mes en que a Mauricio Macri se le volvió a descontrolar el dólar un 10% en un nuevo capítulo de volatilidad cambiaria.
Dentro de los productos nacionales, la mayor suba se registró en la energía: 6,5% mensual. Luego, los productos primarios treparon 5,2%, con fuerte incidencia del crudo (+9%). En tanto, los productos manufacturados subieron 3,6 por ciento.
El dato de que la inflación minorista de los últimos 12 meses haya sido del 54,7% y la mayorista de 68% deja en claro que, al menos, hay un 13,3% de suba de precios al consumidor final reprimida del 13,4%.
«La evolución de los precios mayoristas de los productos importados está creciendo a un ritmo menor que la variación mensual promedio del tipo de cambio, efecto que puede explicarse parcialmente por la no convalidación de la demanda», dijo Juan Lezica, economista de la consultora ACM.
El índice de costo de la construcción también se aceleró, pero a 2,6%, lo que dejó un alza interanual del 45,3%. «Tanto los precios mayoristas como los costos de construcción mostraron un incremento muy superior al mes de febrero. A pesar de la merma en la actividad, la depreciación del tipo de cambio de casi el 11,2% en el mes de marzo y la variación en la cotización de selectos commodities han impactado en esos precios, en especial en aquellos productos primarios», explicó Lezica.
