Estados Unidos le impuso este lunes fuertes sanciones a la petrolera venezolana PDVSA por 7.000 millones de dólares, en lo que es la medida más dura hasta el momento contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Las sanciones fueron anunciadas por el asesor en Seguridad Nacional John Bolton, con el objetivo de aumentar la presión contra Maduro y demostrar el apoyo de Washington a Juan Guaidó, el líder opositor venezolano que se proclamó presidente interino la semana pasada y fue reconocido de inmediato por Estados Unidos y otros países.
Estas sanciones anunciadas representarán un impacto de 11.000 millones de dólares en exportaciones durante 2019.
«Hemos continuado exponiendo la corrupción de Maduro y sus amigos y la medida de hoy garantiza que ya no puedan saquear los activos del pueblo venezolano», declaró Bolton a periodistas en una sesión informativa.
PDVSA representa la mayor fuente de ingresos para Venezuela y tiene la filial Citgo Petroleum en Estados Unidos, su activo extranjero más importante.
