El Concejo Deliberante ingresó para su tratamiento en comisión durante la sesión de este jueves una ordenanza por la cual se instalarán más reductores de velocidad en las calles de General Acha, y estableció dónde y porqué deben realizarse.
De esta manera, el Ejecutivo quedará facultado para instalarlos en las cercanías de establecimientos educativos públicos o privados, estadios deportivos, templos y cualquier otro lugar donde se produzcan aglomeraciones de personas en forma diaria y/o en cruces viales, o peatonales que por sus características generen riesgos a la seguridad vial.
Y también donde existan denuncias de vecinos, de casos que representen un factor real y/o potencial de accidentes.
La señalización de la ubicación de los mismos debe ser clara, precisa, visible de noche o de día, de ser posible, cincuenta metros antes de cada reductor se deberá indicar la existencia del mismo.
En los fundamentos, se indicó que la ordenanza es necesaria ya que en la actualidad no se cuenta con una legislación que permita encuadrar en un marco legal la utilización de los “reductores de velocidad”.
