Rusia bombardeó un pueblo de Ucrania dejando un saldo de al menos 51 víctimas fatales

Un misil disparado por Rusia alcanzó este jueves un almacén y un bar en un pueblo del este de Ucrania y mató al menos a 51 civiles en uno de los ataques más letales en meses en el país, que ocurrió mientras el presidente Volodimir Zeleneski asistía a una cumbre europea en España para pedir a Occidente más apoyo militar ante la invasión rusa.

La Fiscalía General de Ucrania informó que el ataque alcanzó una tienda de comestibles y una cafetería en Groza, un pueblo cercano a la ciudad de Kupiansk, en la provincia de Jarkov, que limita con Rusia.

Uno de los fallecidos es un niño de seis años. Otras siete personas, por ahora, han resultado heridas, agregó la Fiscalía.

Zelenski dijo en sus redes sociales que se trató de un «ataque terrorista completamente deliberado».

«Rusia necesita de este y de otros ataques similares para hacer de su agresión genocida la nueva norma para el mundo», agregó.

La Presidencia ucraniana difundió fotografías de los momentos posteriores al ataque en Groza, en las que se veían cuerpos tirados sobre el pasto y una mujer arrodillada sobre ellos.

Otra foto mostraba a bomberos y soldados buscando a sobrevivientes en los escombros de lo que parecía ser una casa. El pueblo tenía 500 habitantes antes del inicio de la guerra en Ucrania, pero muchos de ellos se han ido.

La coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania, Denise Brown, dijo estar «horrorizada» por el bombardeo. «Las imágenes provenientes de este pueblo, en donde viven un poco más de 300 personas, son absolutamente terribles», escribió en un comunicado.

Más temprano, Ucrania dijo que Rusia había atacado el país con drones en otro bombardeo masivo.

Autoridades rusas, por su parte, denunciaron un ataque ucraniano con bombas de racimo, un arma controvertida que Ucrania recibió de EEUU, que dejó un herido en una ciudad de Rusia cercana a la frontera ucraniana.

La Fuerza Aérea ucraniana informó que las defensas aéreas del país interceptaron 24 de 29 drones lanzados en la madrugada por Rusia contra las sureñas provincias de Odesa, Mikolaiv y Kirovogrado.

Andriy Raykovych, gobernador de Kirovogrdo, dijo que una instalación de infraestructura de la región fue alcanzada por un ataque ruso y que se desplegaron servicios de emergencia para apagar un incendio.

No hubo víctimas, agregó.